Política
Con el objetivo de defender los intereses comerciales del país y mitigar los posibles efectos de la nueva política arancelaria de Estados Unidos, el Gobierno de Colombia, a través del Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, anunció el envío de dos cartas oficiales dirigidas al secretario de Comercio y al representante comercial de ese país. Así lo informó este viernes Cielo Rusinque, ministra encargada de la cartera, quien explicó que estas comunicaciones formales buscan manifestar la voluntad del Estado colombiano de iniciar una negociación sobre el arancel base del 10 %.
Este arancel, impuesto inicialmente durante la administración del expresidente Donald Trump, afecta actualmente a más de 180 países con los que Estados Unidos mantiene relaciones comerciales, incluyendo a Colombia. Su aplicación generalizada ha generado preocupación en distintos sectores exportadores por el impacto que podría tener sobre la competitividad de los productos colombianos en el mercado estadounidense.
Según Rusinque, la decisión de avanzar con estas gestiones diplomáticas se tomó luego de un riguroso análisis técnico por parte del equipo del Ministerio, que evaluó los posibles escenarios para la economía nacional ante el endurecimiento de las condiciones comerciales internacionales. “Hemos considerado los riesgos que esta política podría implicar para nuestras exportaciones, en especial para sectores clave como el agroindustrial, el textil y el manufacturero, que dependen en gran medida del acceso preferencial al mercado estadounidense”, señaló la funcionaria.
La ministra encargada también destacó que esta iniciativa busca mantener abierto el canal de diálogo bilateral con Washington, en un contexto global marcado por la incertidumbre comercial. “Colombia es un socio estratégico de Estados Unidos en la región, y creemos que es posible construir soluciones que protejan los intereses mutuos, promoviendo el comercio justo y sostenible”, agregó.
Con estas cartas, el Gobierno colombiano aspira no solo a abrir una mesa de negociación, sino también a reiterar su compromiso con el fortalecimiento de las relaciones comerciales entre ambos países. Las autoridades nacionales confían en que este paso permita encontrar una vía que salvaguarde los intereses de los productores colombianos, al tiempo que se respetan las normativas comerciales internacionales.
Finalmente, Rusinque subrayó que se mantendrá una comunicación constante con los gremios y actores económicos del país para informar sobre los avances en esta gestión y construir una posición conjunta que represente los intereses de Colombia en esta etapa clave de diálogo comercial.